El packaging también es una estrategia de marketing y una gran herramienta de comunicación, publicidad y promoción. A veces, nos comemos el tarro con acciones de marketing liosas que no llegan a ninguna parte, o no damos con una estrategia adecuada para un producto, para lanzarlo al mercado o algo tan sencillo como dar un giro a su imagen. En ocasiones, es más sencillo que todo eso.
Un cambio en el packaging puede ser una estrategia perfecta de diferenciación y marketing para atraer la atención del consumidor y generar expectación, porque una cosa hay que tener clara: sea cual sea tu sector o tu producto, es importante planificar una estrategia. Esta vez, nos referimos al empaquetado, envase o embalaje de algo. Para muchos, el arte de atraer al cliente e incidir en su decisión de compra.
El packaging o envase es uno de los principales elementos de la identidad visual de la empresa. De algún modo, muestra la imagen corporativa de la marca y, por tanto, conviene cuidar su diseño.
Pero el packaging no es solo diseño, sino que adquiere mayor importancia si éste presenta un valor añadido al consumidor. Además de atraer la atención de la persona que va a adquirir el producto y generar confianza en él, debe tener la funcionalidad de protegerlo y mantener la calidad del mismo.
Claves en el diseño del packaging para una buena estrategia de marketing
El packaging debe llamar la atención del consumidor y destacar entre el resto de los productos de su misma gama, de tal forma que el paquete o envase refleje la imagen de tu producto y de tu marca. La forma, el color, el tamaño o el material son factores generan una percepción en el consumidor y será lo que haga que elijan ese producto y no otro. Se trata de obtener con ello una ventaja competitiva que destaque frente al resto de productos, conectando con las necesidades de los consumidores y manteniendo al esencia y los valores de la marca.
De hecho, este aspecto está estrechamente relacionado con la neurociencia o también conocido como el branding emocional. Y actualmente existen numerosos estudios que relacionan determinados comportamientos cerebrales con colores y formas. Aseguran que el 90% de las decisiones de compra están motivadas por el impacto visual.
‘El 90% de las decisiones de compra están motivadas por el impacto visual’
Hoy en día prima la sencillez y la limpieza en un diseño, siempre con un toque de creatividad e innovación. Pero esto por supuesto, dependerá de la imagen de la marca, de lo que se quiera transmitir y muy importante, del público al que nos dirijimos.
En definitiva, el packaging deberá destacar frente al resto, ser original, práctico, y sobre todo funcional y versátil, ya que si a ese envase se le puede dar otra utilizar es un valor añadido al producto.
Y recuerda, si te apetece diferenciarte del resto…